The collector girl

    Soy una especie de coleccionista, colecciono  versos, pétalos curiosos de flores sencillas, hojas, nubes (las cuales al ser descubiertas sus formas se disfrazan nuevamente de abstractos perfiles, jugando a hacer un travieso test de Rorschach a mentes desprevenidas), canciones, estribillos, Bendiciones, Promesas, miradas (indelebles en la memoria), melodías (mis preferidas son las espontáneas, únicas y escurridizas como pececillos dorados que besan la punta de la lengua y apenas terminan la caricia en la garganta, desaparecen tal cual vinieron dejando una sensación agradable y eterna en mi alma).

También suelo coleccionar noches y una que otra madrugada, las cuales son preciosas aquí en la selva, ya que al vivir cerca a las montañas, puedo oír el  chismorreo de los grillos y uno que otro canto de algún pajarillo con insomnio igual que yo… xD

Me gusta coleccionar en la memoria la respiración acompasada del amor que descansa a mi lado y que duerme tan profundamente que no siente mi deslizar felino de las sábanas al computador jeje. Colecciono también los versos sueltos de mi princesa que en sus juegos infantiles, canta a sus juguetes historias de amor y verdad… tan solo para arrancarme una carcajada y un par de cosquillas aprende a rimar mi apellido en pegajosas melodías.

Otra cosa que colecciono son recuerdos, especialmente los bonitos, (como todos no?), como el de aquel día que trepé un árbol de mango en busca de la codiciable presea, ya en el último tramo, no me fijé en la delgadez de la rama que  yo, creyéndome tan ligera como una mariposa, pisé sin medir daño, cuando de repente.. ¡crash!, partióse (si, si se me sale la influencia xD) la bendita y caí como 5 ó 6 metros hacia abajo, pero eso sí ¡con el mango en la mano! Y un vestido amarillo que se abrió al contacto del viento que contrariado por la gravedad, soplaba para que me funcionase la falda como paracaídas sin lograr su cometido… finalmente siendo las posaderas y demás humanidad acariciadas por una multitud de hojas y ramas en el vasto suelo.

Soy una especie de coleccionista,  colecciono muchas cosas en particular y las guardo a buen recaudo en  un preciado lugar tan impenetrable como incógnito, bien cuidadas, amadas y atesoradas.. Están en mi mente “ahicito” nomás